El mundo mejora por las implementaciones
Javier Buitrago, miembro del grupo Vistage 51, comparte su concepción del mundo como exhibición de ideas brillantes que los líderes empresarios locales pueden implementar para mejorar la vida de sus comunidades.
Experto de la industria Fintech y ex gerente general de la billetera digital Zinli, con sede en Panamá, Javier comenzó su carrera especializándose en pagos, allá por la década del noventa, cuando no existía una capacitación formalmente instalada: “uno aprendía de pagos en la cancha, haciendo”. La experiencia fue adquirida a lo largo de su paso por grandes empresas, de las que rescata un aprendizaje común: “el mundo como una exhibición de ideas brillantes que uno puede tomar para innovar e implementar en su comunidad, en su mercado local”.
- ¿Podrías desarrollar ese concepto?
Es la diferencia entre ser el inventor o ser un innovador. Un concepto que muchas veces choca con paradigmas culturales. En el colegio nos enseñan que copiar está mal (lo cual es correcto en ese ámbito). Pero en la vida uno tiene que copiar todas las ideas buenas del mundo. Muchos éxitos empresariales latinos son copias de éxitos mundiales. Esto lo viví en Falabella, lo viví en Despegar y también lo viví en PayU.
- Mencionás compañías en las que construiste tu carrera y ganaste expertise. Contanos.
Macy’s y Bloomingdales, éxitos americanos, fueron inspiración para todo el retail latinoamericano, para las tiendas departamentales y para Falabella en particular. El creador de Despegar.com, Roberto Souviron, hacía un posgrado en Estados Unidos cuando ocurrió el boom de las agencias de viajes online. Así se inspiró para desarrollar su compañía, sabiendo que las empresas estadounidenses tardarían varios años en llegar a Latinoamérica. Cuando finalmente llegaron, se asociaron con la suya, porque ya era un éxito. El grupo Napster, con múltiples unidades de negocio de e-commerce en África y en el sur del mundo, necesitaba tener un PayPal (cuando PayPal era un éxito sólo en Estados Unidos) y entonces desarrolló PayU.
- ¿Y en qué medida estas compañías te fueron acercando al segmento de pagos y te inspiraron para resolver necesidades financieras a través de la tecnología?
Yo era licenciado en administración de empresas, tenía un posgrado en marketing, pero nunca había tenido pagos. Mi aprendizaje en pagos se dio inicialmente con la tarjeta Falabella. En ese momento Falabella era un líder indirecto del sistema financiero (en Chile el éxito fue tal, que llegó a haber más tarjetas Falabella que la suma de todas las tarjetas bancarias del sistema, lo que llevó a abrir su propio banco, el Banco Falabella). Y eso me fue llevando a otras aventuras de construir financiamiento, nunca en la banca, siempre complementando la oferta de la banca.
Muchos dicen que el inicio de las Fintech es en 2008. Fijate que acá estamos hablando de 1998 y yo comienzo en los pagos con las tarjetas tradicionales. Muchas cosas que hoy son revolucionarias tienen una historia analógica detrás. El financiamiento al retail existió de toda la vida, lo que va cambiando es la manera, la metodología, las herramientas, los proveedores…
- Pero ya estamos en un mundo digital. ¿Cuál es tu visión respecto de la digitalización del sector financiero?
Es una enorme oportunidad, porque la digitalización es necesaria para el propósito final: una inclusión financiera plena. Que todos tengamos todas las herramientas financieras que necesitamos y queremos para tener una vida financiera plena. Vos no te sentís un millonario porque tenés cuenta bancaria o tarjeta de crédito o débito. Sin embargo, si lo miramos estadísticamente, la mayor parte de Latinoamérica no está incluida financieramente.
- ¿Qué falta, entonces?
La tecnología está y el conocimiento está. Lo que falta son líderes haciendo foco en implementar todo eso para lograr un salto. Por un lado, tenemos líderes tratando de armar ciudades en Marte y por otro, gran parte de la población todavía no tiene cosas que son básicas. Entonces, como líderes privados, nosotros somos los que construimos el futuro de nuestras comunidades. Cómo hago para resolver la vida financiera de la gente, esa es la cuestión. Cómo hacemos para que toda Latinoamérica tenga todas las herramientas para tener una vida financiera plena mañana, no dentro de diez años.
- ¿Y cómo ves el avance en los distintos países de la región?
Argentina es un referente global en pagos digitales. Obviamente, Brasil es el gran referente por sus dos grandes éxitos mundiales, que son Nubank (banco digital) y Pix (riel de pagos instantáneos). Pero es impresionante el desarrollo que la Argentina ha logrado en las Fintech y, en consecuencia, en la inclusión financiera. Y el éxito argentino también es un éxito regional. Mercado Pago nace en Argentina, pero es un éxito en Brasil y en el resto de Latinoamérica. Ualá, que es un unicornio argentino, está en Colombia y México. Y hay varios referentes Fintech argentinos que ya son éxito en otros países del mundo.
- Hablemos de Zinli. ¿Cómo nace esta billetera digital?
Zinli es producto de lo mismo. Panamá tiene casi el doble de bancos que Argentina y el 10% de la población. Es casi el quinto sistema financiero en Latinoamérica, un éxito económico sin banco central y está dolarizado. Ahora, desde una mirada estrictamente de inclusión financiera, por ejemplo, la penetración de la tarjeta de débito es del 28%. Esto significa que el 70% de los panameños ve una tarjeta Visa o Master como un privilegio. Y lo mismo sucede con las empresas: las pequeñas y medianas no tiene cuenta bancaria y se manejan en efectivo. La oportunidad de resolver tales dinámicas es enorme y el trabajo de las Fintech es justamente romper esas barreras del mundo del pasado, aprovechando la tecnología como un facilitador. Con ese contexto, y como experto de pagos digitales, me invitaron a ayudar a lanzar Zinli en Panamá y nos ha ido fantástico.
- ¿A qué atribuís ese éxito?
A que justamente le dimos al panameño y a toda la comunidad de extranjeros en Panamá las mismas herramientas que tienen los brasileños, los argentinos, los europeos, los asiáticos. No es una discusión tecnológica, no es una discusión de conocimiento, porque la tecnología es la misma y es casi un commodity a nivel mundial. La gran diferencia la hacen los líderes locales implementando soluciones sumamente exitosas en otras partes del mundo para mejorarle la vida a sus comunidades.
- ¿Cómo dimensionás el negocio hoy?
Hoy Zinli tiene más de un millón de clientes y todos los días suma a más de mil usuarios nuevos. Es la billetera digital más importante de Panamá y referente en todo el Caribe. Zinli es el principal emisor de tarjetas Visa prepaga desde hace varios años. Es proveedor de World Food Programme (WFP-UN), que entrega tarjetas con ayuda económica a las comunidades más necesitadas y migrantes. Zinli es un éxito desde el lanzamiento y no para de crecer.
- Formás parte de Vistage desde hace más de diez años. ¿Cuáles son los beneficios que te aportó tu grupo a lo largo de tu carrera?
Vistage me acompañó en muchas aventuras. Fue un punto de referencia para una cantidad de decisiones en escenarios de alta incertidumbre, no solamente por el país, sino también por los saltos en la industria.
Desde todo punto de vista, el modelo Vistage es sumamente exitoso, porque es muy difícil tener muchas conversaciones propias de líderes en otro contexto. En Vistage tenés total confidencialidad y una hermandad con empresarios que entienden los problemas y los desafíos de ser empresario, con los cuales uno puede pensar en voz alta.
Es un modelo muy bien pensado, porque no tenés competidores en los grupos. Tenés una variedad de líderes, de industrias, con problemáticas distintas, que aportan miradas y experiencias particulares en la toma de decisiones. Por ahí no cambian la decisión, pero seguro que la mejoran.
- ¿En qué proyectos y desarrollos está Zinli trabajando actualmente?
En Zinli fuimos disruptores en todo y va a seguir siendo disruptores en todo, desde la tarjeta para los más jóvenes o permitir que un extranjero pueda abrir una cuenta. Seguirán siendo disruptores y ayudando a que las comunidades eliminen las barreras que tienen para mover su dinero. Por eso el slogan, “Tu dinero Zin límite”. Porque es tu dinero y desde Zinli queremos que vos lo muevas adonde quieras.