Fuente: Punto a punto
Ernesto Cordeiro, miembro Vistage del G178 y CEO de Grupo Cordeiro, comparte los logros y estrategias de expansión de la compañía, que ha experimentado un crecimiento cercano al 50% en producción.
Ernesto Cordeiro es el CEO de Grupo Cordeiro, un grupo empresarial pyme cordobés hoy compuesto por la compañía de yerba compuesta Verdeflor y La Blanca, dedicada a la producción y comercialización de dulce de leche industrial. Entre los puntos destacados de esas empresas sobresalen un par de importancia:
Con 20 años de vida La Blanca provee dulce de leche a las principales alimenticias y cadenas de helados del país y son el segundo proveedor de dulce de leche industrial local. Verdeflor, con el doble de recorrido, es hace tiempo la segunda marca más importante del país para el rubro de yerbas compuestas.
“En los últimos años, diría en los últimos 5, 6 años en que la segunda generación de la familia tomó el mando de la compañía logramos plasmar un plan de crecimiento y sobre todo de mayor profesionalización en nuestros proyectos. Así, hemos crecido en torno al 50% en producción y estamos cumpliendo varios de los proyectos en carpeta”, cuenta Ernesto Cordeiro, hoy CEO del grupo.
Con todo, reconoce que se viene de meses de coyuntura compleja: “El 2023 fue complicado, con una macro que ha llevado a una baja en el consumo. El desafío principal hoy es agudizar el ingenio para no perder terreno. Estamos acostumbrados a movernos con inflación, entonces hay que trabajar bien el stock, pero siempre entregando, porque sino perdés con la competencia”, dice.
Y detalla: “Hoy si estas fuera de precio no vendes. El consumidor por poca plata te cambia. Por eso no hay tanta diferencia de precios entre las distintas marcas, al menos en el rubro de yerba compuesta. Intentamos mejorar, mantener la esencia, actualizar diseño, apuntar a una yerba más estacionada, dándole más servicio y cobertura de distribución. Hoy estamos en todos los puntos que necesitamos estar en el país, aunque nos falta más capilaridad, sumar más localidades o en puntos de venta de más proximidad en el interior de las provincias. Lo estamos trabajando, ahora unificamos la gerencia logística in/out de todo el grupo. Eso nos permite llegar a más lugares y de forma mejor. Y unificando equipos comerciales para comercializar los productos”.
Dulce industrial
Yendo al negocio del dulce de leche Cordeiro repasa que La Blanca nace como una iniciativa de su padre y fue creciendo de forma orgánica.
“Mi padre que era una persona muy emprendedora. Empezó a hacer ganadería en un campo en Río Tercero, un campo que compró para retirarse, pero lo empezó a trabajar. Cuando Brasil dejó de comprar leche a Argentina se empezó a caer el consumo de leche y con eso el precio. Ahí vimos que la única forma de sostener el tambo era industrializar, entonces construimos una fábrica pequeña para empezar a envasar dulce de leche. En 2003 se compra otro terreno, se levanta otra planta. Y empezamos con la venta de producto a panaderías y supermercados y a algunas industrias. Teníamos muy buena relación precio-producto. Cuando la economía empezó a recuperarse el consumidor buscó volver a las primeras marcas. Y ahí decidimos enfocarnos en el negocio industrial e hicimos ampliaciones para la planta”.
Así, entre 2019 y el presente la capacidad productiva de La Blanca creció un 80%. “La proyección es seguir creciendo, tenemos un master plan que apunta a duplicar capacidad instalada y contamos 15 proyectos en marcha. La mayoría de nuestros clientes son grandes industrias de helados y alfajores. El 80% de los alfajores que ves es un kiosco tienen nuestro dulce de leche. Hoy somos el segundo productor industrial de dulce de leche del país».
“Como crecimos en el segmento industrial nos retiramos del consumidor final y del retail. Aún así, tenemos en vista, cuando terminemos la ampliación de la planta en Río Primero, retomar ese negocio. Es una picardía no estar hoy porque tenemos el brazo comercial con Verdeflor, pero lo vamos a retomar”.
-¿Cómo es tu horizonte para Grupo Cordeiro en el mediano y largo plazo?
-Veo un horizonte de crecimiento de estas empresas, hoy Cordeiro es la séptima empresa de yerbas a nivel nacional y la segunda en compuestas, me gustaría estar en entre las cinco primeras. La Blanca tiene mucho potencial de crecimiento, y como Grupo estamos estudiando otros productos para aprovechar el canal comercial brindando nuestros fuertes, que son productos de calidad y van a dar una buena experiencia de consumo. Queremos ampliar el portfolio, el rubro infusiones es un espacio donde podemos expandirnos, siempre con productos naturales, no procesados. Y tener presencia en mercados vecinos, hay que volver a tener competitividad como país para conquistar más mercados. Soy optimista para la región. Ya exportamos a varios países, pero hay mucha demanda a la que podemos atender.
-¿Qué mercados externos miran?
-Como mercados interesantes para comercializar vemos Brasil, México y EEUU que es un mercado donde se está creciendo mucho en lo familiar.
-¿Cómo ves esta macro en términos del consumo?
-Con un dólar competitivo, con generación de energía, con las reservas de litio, Vaca Muerta, con el campo trabajando creo que el país tiene que salir. Lamentablemente creo que falta algo de caída, algo de sinceramiento y de ahí vamos a ver el rebote. A diferencia del 2001, cuando no había gente en la calle, ahora sí hay consumo porque la gente no quiere los pesos. Esta es una crisis compleja
-¿Cómo encaran las inversiones que hacen?
– Hasta ahora todas las inversiones fueron con capital propio. Cuando nos hicimos caso, como segunda generación, se tomaron dos decisiones, la primera la de contar con un protocolo familiar, pensando en el día de mañana de nuestros hijos y lo otro fue cúal iba a ser la estrategia de utilidades y definimos reinvertir prácticamente toda la utilidad para financiar el crecimiento. Ese chip de la reinversión nos quedó de nuestro padre. Si nosotros no podemos acceder al mercado internacional de crédito no vamos a poder tener tasas para crecer. Pero confío en que va a volver, aunque va a llevar dos años. Creo que salir de esta coyuntura va a costar un año y medio dos. Me refiero a volver a tener números razonables de inflación y tasas.
-¿Pero se puede invertir en esta coyuntura?
-Nosotros invertimos constantemente, la inversión no es una foto, es una película. Es algo constante en tecnología y capacidad instalada. Si vos no creces la competencia ocupa el espacio. Pero soy optimista, el país tiene que administrarse de otra manera, al igual que en nuestra casa, no podemos vivir gastando más de lo que nos ingresa. No es viable.